En abril de 1992, recogí una información sobre las costumbres de semana santa en el pueblo El Rincón.
De una entrevista que le hice a José Cuantreras, recopilé estas recetas que pueden ser completadas por quienes se las conozcan en detalle.
Esta manera de celebrar la semana santa ya no se practica, en unos pocos años se perdieron las costumbres… será que se pueden recuperar todavía?
Era así:
Las semanas santas en el Rincón son celebradas de una manera distinta al ritual común de las ciudades y otros pueblos. Se preparan una serie de platos para compartir con todo visitante. Las comidas que se preparan son:
MOTE DE GUANDÚ.
El guandú es una fruta que se hierve y se le pica ñame, plátano maduro, pescado, yuca y se revuelve hasta que desbarate.
ARROZ DE CARAUTA.
Se hierve la carauta. Cuando ésta ablande, se le raya coco. Se cuela la leche del coco. Se hecha al caldero y se le agrega el arroz para que se frite el arroz con la carauta.
GARAPACHO DE ICOTEA.
Todas las familias salen a buscar una tortuga icotea por el monte para poder hacer el plato y comerlo.
PESCADO GUISADO.
Se come pescado todos los días , pero en época de Pascua, lo guisan.
REVOLTILLO DE BAGRE.
Todos estos platos acompañan el arroz de carauta.
Los pasabocas son:
EL DULCE DE PLÁTANO.
Cocinado en olla de barro y se le agrega clavito, panela y canela.
DULCE DE MANGO BICHE.
Se sancocha el mango en agua, se le bota el ácido, se pela y se le hecha azucar después de hervirlo.
Y EL DULCE DE PAPAYA
Todo extraño, conocido, amigo o vecino es bienvenido en cada casa a comer estos platos de semana santa.
LA CHICHA con maiz apilado y azúcar, es una de las bebidas que se preparan.
El principio de la semana santa es para dedicarle tiempo a los amigos, a hacer favores a familiares. Luego el viernes santo salen las mujeres y niños a buscar al monte a las doce del día, la hoja de olivo, que lo ponen en las casas para evitar la hechicería.
Los viernes santo no se acostumbraba poner música en el pueblo, sólo se oían los sermones. Pero José dice que los tiempos han cambiado. Después de ir por el olivo, la familia se reune a orar a dios.
José dice que la mística se ha estado perdiendo.
Gracias José Contreras por los recuerdos compartidos.